Además de estar cerca de cerrar la transferencia de Dembélé, el PSG tiene un acuerdo para incorporar a uno de los delanteros más prometedores del fútbol portugués. Luis Enrique está más que feliz.

ejos del entrampado lío con Kylian Mbappé, Luis Enrique busca que su planificación para armar su plantilla en el París Saint Germain no dependa de terceros. Así pues, mientras ‘Kiki’ va solucionando sus desavenencias con los directivos respecto a la renovación de su contrato, el entrenador español está más que contento porque dentro de poco tendrá a dos delanteros para completar su esquema ofensivo: además del conocido acuerdo con Ousmane Dembélé, en la capital de Francia están próximos a cerrar el trato con Gonçalo Ramos.

La posición de centrodelantero era una preocupación para el director técnico de 53 años y con el arribo del portugués esto estaría resultado. Si bien venía realizando la pretemporada con el Benfica, las negociaciones comenzaron hace varias semanas y, según la información revelada por Fabrizio Romano, ya entraron en la etapa definitiva para que se dé la firma del contrato.

El Paris Saint Germain fichará tanto a Gonçalo Ramos como a Ousmane Dembélé en las próximas horas/días. El plan es que ambos estén listos para el fin de semana. Cuestión de detalles para lo de Ramos, trato que se cerrará muy pronto ya que podrían reservarse pruebas médicas en los próximos días”, publicó el periodista italiano en su cuenta de Twitter.

Cuando se confirme la contratación de Gonçalo Ramos, Luis Enrique tendrá a los siguientes delanteros en su plantilla: Neymar, Kylian Mbappé, Marco Asensio, Hugo Ekitiké, Ilyes Housni y Djeidi Gassama; eso sí, lo más seguro es que estos dos últimos juveniles cuenten con muy pocas oportunidades para alternar en la oncena titular.

Hay que tomar en cuenta que el atacante luso también estuvo en los planes del Manchester United como uno de sus posibles fichajes. Si se caían las negociaciones por Rasmus Højlund, los directivos de los ‘Red Devils’ estaban dispuestos a ir por el del Benfica. No obstante, este tenía como prioridad al PSG.

Sin Mbappé como miembro del plantel –al menos por ahora–, Luis Enrique es consciente de que no puede quedarse corto de delanteros. La Champions League es el objetivo prioritario y sabe que para ganarla, como lo hizo en el 2015 con el FC Barcelona, necesita un arsenal de delanteros capaces de resolverle los partidos cuando el trámite de ponga complicado.